LAS COSAS DE LA VIDA

El viento en su peregrinaje traerá nuevas cosas, esperanzas renovadas que cada día atesoraré. Caminaré primero con cautela, ya he sufrido lo mío y quizás del todo nunca pase. Renovaré esperanzas, conduciré mi vida de la mejor manera, pero habrá tiempos malos, recuerdos no olvidados rostros que no se irán tan de repente. Recorré las sendas de la melancolía, pero también habrá alegrías, nada pasa tan rápido ni se olvida tan pronto cuando ha sido genuino y lleno de esperanza. Y pasará la vida, un día luego otro y los años que lleguen me irán dando el descanso de saber que lo amado no fue una tontería fue una verdad rotunda, un sentimiento hermoso que no tuvo alegría pues no encontré la forma para que se me amara y batallando sola, luché con valentía para lograr tan solo migajas de alegría. Hoy he cerrado la puerta para que ya no duela, entreabrí la ventana para seguir soñando, quizás con otros mundos, con otras realidades, más nunca con aquello que alguna vez quisiera. Saber amar callada, es la mejor manera de amar cuando se enfrenta a una silueta esquiva que no te deja nada más que... soledad.